I Historia antigua de la sastrería.
Desde que tienes uso de consciencia recuerdas haberte puesto una chaqueta, por ejemplo en tu primera comunión. Seguiste por las primeras fiestas de fin de año donde te sentías imparable quitándote por primera vez el chándal que usabas a diario en el colegio. Y a día de hoy, la chaqueta es sinónimo de tu prenda habitual de trabajo o de tu prenda preferida para ponerte en un boda (Y ojalá de esa boda salga otra boda, eh)
Sin embargo, no tienes ni idea de cual es la historia de la chaqueta, por qué es así, por qué su forma, por qué su uso, nada. Abre el libro, comienza la primera clase de la Bundersidad.
La chaqueta que conocemos hoy en día, tiene su origen en la derivación de la levita utilizada por las clases nobles (sobre todo por los ingleses) en los siglos XVII y XVIII.
A partir de finales de éste último y decididamente a comienzos del XIX, la levita fue perdiendo su larga trasera para hacerla más corta, funcional y práctica sobre todo a la hora de desplazarse en el medio de locomoción habitual de la época; el caballo. De esta forma, una chaqueta mas corta no queda pisada sobre la montura y permite más libertad de movimiento. Entonces, la chaqueta actual proviene de la chaqueta utilizada para montar a caballo como deporte, para cazar, por militares de rango alto y para viajar distancias cortas habitualmente. Una expresión que aún se utiliza en nuestros días sería; “Vivir a caballo entre dos…” como medio de transporte, el cual solo podían permitirse las clases altas, al ser prendas de gran valor y confeccionadas únicamente por sastres.
El ojal de la solapa permanece vigente por el mismo motivo ecuestre. Se incorpora a la prenda como vestigio de su uso practico, que era cerrar la solapa sobre el cuello con un botón en el reverso de la solapa contraría y proteger así esta parte sensible del frio, viento, arena, etc. ¿Cuándo? Sobre todo cuando se montaba a caballo. Actualmente, solo se usa en ocasiones para poner el tallo de una flor (algunos sastres ponen unas trabillas por la parte de atrás para mejor sujeción del tallo) y algunos caballeros, el cierre de algún pin, insignia, condecoración o cadena de reloj o medalla (que descansará en el bolsillo inmediato inferior). El ojal de la solapa, en sastrería debe estar abierto y no ser simulado. Jamás.
También las aberturas traseras tienen origen equino. Se puede elegir entre una o dos aberturas traseras. Su función, es dar comodidad al usuario de la prenda, sobre todo al sentarse, o meter las manos en los bolsillos. Originalmente la evolución de la levita derivó en que la chaquetas solo tuvieran una abertura central, que debía abrirse y descansar a cada lado de la grupa del caballo. En los años 30 y 40 empezó a diseñarse las chaquetas con dos aberturas para solventar la incomodidad de la creciente clase trabajadora sentada en un escritorio, que por supuesto no debían quitarse la chaqueta ni para trabajar, con lo que las dos aberturas ayudaban a que los faldones cayeran por cada lado de la silla y la trasera sin molestar ni sentarse encima de los mismos, evitando arrugas y que el escote del pecho se levantara y abriera de forma antinatural.
¿Qué te ha parecido esta clase? Estoy deseando saber tu opinión, cualquier duda, sugerencia o crítica (constructiva siempre) no dudes en mandar un email a tu profesor preferido. delafuente@bundcompany.com
¡Nos vemos en la próxima clase!